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Sí, porque Cristo, habiéndonos redimido por Su sangre, también nos renueva mediante Su Espíritu; para que nuestras vidas puedan mostrar amor y gratitud a Dios; para que seamos afirmados en nuestra fe por los frutos; y para que otros sean ganados para Cristo por nuestro comportamiento piadoso. 1 PEDRO…
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El amor es lo que manda la ley, y la ley es el cumplimiento del amor. La ley del amor no es una idea recién acuñada del nuevo pacto; está plasmado en la esencia de la fe y la vida del antiguo pacto.
